Los Drunken Cowboys

Los Drunken Cowboys empezaron a cabalgar en el año 2009 por tierras aragonesas a ritmo de su particular Western Etílico: una mezcla de las raíces más profundas de la música americana montañesa con ciertas reminiscencias irlandesas. Disparos, botellas rotas y partidas de póker resurgen con ritmos endiablados que incitan a bailar sobre una pierna con una jarra en cada mano.

Comenzaron con una maqueta casera, WESTERN ETÍLICO (2014), con gran acogida por parte de la escena local. Siguiendo la misma línea la banda liderada por los hermanos Rubio se decidió a sacar su primer disco: WHISKY CON SOGA (2016), grabado y producido en la Cafetera Atómica a cargo de Rafael Domínguez (Bunbury, Tachenko). Una intensa gira de 80 conciertos llamada “Mi caballo bebe más que yo On Tour” abrevó durante dos años en los más insignes establos en festivales de la talla Pirineos Sur o el Folk Delicias, poniendo el punto final al Festival de la Raíz.

Tras formar parte de documentales como Local 7 (2017), dirigido por el cineasta internacional Jorge Nebra o discos que recopilan la música aragonesa como O Zaguer Chilo (2017) llegó su trabajo más ambicioso: L.A. JODIMOS (2018), otros 11 temas que les llevaron a festivales nacionales e internacionales como el DemandaFolk, Titiritías, el Folk & Basté o Hendaia St. Patrick Festival, además de compartir escenario con músicos como Rosendo Mercado en su gira de despedida, situándose como una banda de referencia en la escena aragonesa.

En la actualidad presentan su cuarto trabajo llamado INVOCATIO AD DEOS ETILICORUM (2020). Este proyecto encuadrado bajo el subtítulo de ópera bufa supone una invocación pagana a los dioses de quienes alzan sus copas para brindar por el desarrollo de una noche inolvidable a lo largo de once canciones en la que todos los asistentes son partícipes en la gira “Resacas anticipadas on tour 2020”. Grabado por Diego García (Ara Malikian, estudios pko) en el estudio Audio Feeling y mezclado por José Manuel Huerta y Alberto Espí, este disco resume más de diez años de carrera y madurez de la banda en las nuevas canciones que esperan sean su salto y consolidación en la escena nacional.

Ensillen sus jacas y limpien sus herraduras, pues esa noche el que menos beba paga la cuenta del Saloon. Rellenen sus barriles y guarden a buen recaudo su ganado. Quedan ustedes avisados: Los Drunken están en la ciudad.

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